Habilidades personales más valoradas por las empresas
El contexto de empleabilidad ha vivido una fuerte transformación tras la pandemia del COVID-19. La aceleración digital y la implementación del home office han hecho que las empresas demanden perfiles más técnicos, como profesionales en Ciencia de Datos, Computación en la Nube, Diseño UX (Experiencia del Usuario), entre otros. Sin embargo, también se han priorizado candidatos con habilidades personales o soft skills bien desarrolladas debido a que favorecen la comunicación, la colaboración y adaptación de las organizaciones frente a los cambios constantes en el mercado.
¿Qué son las habilidades personales y cómo se diferencian de las hard skills?
Las hard skills son todos aquellos conocimientos técnicos o especializados necesarios para ejecutar tareas específicas. Pueden ser habilidades lingüísticas, de marketing, tecnológicas, contabilidad, entre otras. Las soft skills, por el contrario, son aptitudes que están relacionadas con la capacidad cognitiva, las actitudes en el lugar de trabajo y la inteligencia emocional. Algunos ejemplos de soft skills o habilidades personales son trabajo en equipo, resiliencia, espíritu de crecimiento, entre otras.
Su relevancia en el panorama actual, además de la necesidad de flexibilidad, radica en que los lugares de trabajo actuales son más colaborativos y, por tanto, requieren habilidades sociales; además, mejoran la experiencia del cliente a través de habilidades como la empatía y son competencias que no pueden replicarse o reemplazarse por la inteligencia artificial.
De acuerdo con Linkedin, las soft skills faltantes en los candidatos y que por eso están dentro de las más solicitadas son la resolución de problemas, el pensamiento crítico, la innovación y creatividad, y las aptitudes de comunicación.
Tips de habilidades personales: ¿cómo potenciarlas?
Ahora que sabes qué son las habilidades personales, te compartimos algunas estrategias para desarrollarlas y para que puedas mejorar tu perfil profesional.
Mantén la escucha activa
Es importante pasar de oír a escuchar a consciencia. Esto te ayudará a detectar los señalamientos que hacen compañeros sobre tu trabajo o actitud, ser más empático con las necesidades de los demás, aprender más rápido y con precisión y captar mejor las instrucciones a tus deberes. Por otro lado, como líder, poner en práctica la escucha activa es efectivo para generar más confianza, promover la participación y solucionar crisis en los grupos de trabajo.
Sé tolerante con tus errores
Trabajar la tolerancia a la frustración también es importante para encontrar soluciones a los problemas, reconocer los propios límites y ser más flexible frente a las situaciones. Una buena forma de ponerlo en práctica es planteando expectativas o resultados realistas, enfocándote en tus fortalezas y meditar o realizar una respiración profunda cuando sientas ira o quieras emitir respuestas impulsivas.
Pide retroalimentación
Puedes solicitarlo a tus jefes o superiores, a tus compañeros y a tus propios empleados. Esto es útil, ya que te permite detectar tus puntos débiles y fortalezas, fomenta también la autocrítica, es posible evitar o prevenir conflictos antes de que crezcan, en materia de actividades o relaciones interpersonales, y mejora la comunicación y confianza entre los equipos de trabajo.
Sal de la zona de confort
Enfrentarte a nuevos retos es la mejor forma que tiene la mente para romper hábitos dañinos y mejorar conductas. Una vez fuera, pones a prueba nuevamente estrategias de aprendizaje y “echas a andar” el pensamiento crítico y la resolución de problemas para adaptarte y entender el nuevo entorno. Así que el secreto está en arriesgarte a realizar otro tipo de actividades, proponer nuevas estrategias o adquirir nuevas responsabilidades.
Apóyate en coaching o cursos
Dentro de los tips de habilidades personales tampoco debe faltar la búsqueda de cursos en línea, seminarios o talleres en donde se implementen tácticas de inteligencia emocional o habilidades sociales. Puedes optar por algunos que trabajen la gestión de proyectos y negocios, donde te enseñen a ser buen comunicador o alguno en el que aprendas a manejar tus emociones.
Ahora que conoces algunos ejemplos de soft skills, es momento de que reconozcas cuáles son las más importantes en tu crecimiento profesional y así empezar a desarrollarlos. Además, estudios han estimado que los líderes con habilidades sociales pueden aumentar el desempeño de su equipo en un 30%, por lo que adquirir competencias como empatía, asertividad, tener capacidad de negociación, entre otros, puede ayudarte a impulsar mejor tus grupos de trabajo o llegar a puestos de liderazgo.
¿Estás buscando empleo?
Encuentra un trabajo que te apasione con la ayuda de nuestro reclutador Kelly Bot
En Kelly te conectamos con el mundo del trabajo
Continuar leyendo: 10 consejos para redactar el mejor currículum vitae