¿Cómo es para ti una mañana ideal? Tus ojos se adaptan al rayo de sol que se asoma por la ventana. El canto de los pájaros te hace sonreír mientras te estiras antes de levantarte. Tomas tu primera taza de café mientras lees las páginas de una novela de suspenso y crimen que te tiene un poco obsesionado. Entonces, llega la hora de prepararte para el trabajo.

Para la mayoría, la mañana puede tomar un giro diferente.

La alarma de tu teléfono suena debajo de tu almohada. Café indispensable. Revisar rápido tus correos electrónicos... 10 minutos después. La rutina y el caos de la mañana te esperan. De repente, la lista de tareas pendientes del día se convierte en una tarea larga. ¡Es hora de comenzar tu jornada laboral!

¿Puedes identificarte con una de las rutinas mencionadas?

Ninguna versión es perfecta... pero lograr un equilibrio saludable entre el trabajo y la vida personal es esencial para crear la versión más feliz de ti mismo. Un equilibrio equitativo entre el trabajo y el placer puede reducir los niveles de estrés, aumentar la concentración, mejorar la satisfacción laboral y brindarte la oportunidad de perseguir metas personales.

Estos son nuestros mejores consejos sobre cómo lograr un equilibrio armonioso entre tu trabajo y tu vida personal:

1. Aprende a decir 'no'.

Es mucho más fácil decir sí que decir no. ¡Lo entendemos! Aprender a decir no a las demandas irrazonables te dará más tiempo para concentrarte en las tareas que son prioridad. No es fácil, pero hay que empezar por algún lado.

2. Programa tu tiempo de manera efectiva.

Cómprate un nuevo diario, prioriza tus tareas, tanto por importancia como por fecha de vencimiento. Asignar tiempo para cada proyecto y tarea y garantizar un sentido de orden en tu rutina te permitirá controlar tu enfoque y realizar las tareas cuando sea necesario (¡liberando tiempo para otros proyectos!)

3. Pide ayuda.

Si estás haciendo todo lo que puedes durante las horas de trabajo, pero aún sientes que no puedes completar tus tareas, es hora de pedir ayuda. Evita el estrés, tu equipo y gerente están allí para ayudarte en el camino. No eres una isla.

4. Conoce tus derechos.

Si te sientes agotado y tu organización ofrece soluciones de trabajo flexibles o facilidades para atender asuntos familiares, utilízalas. Ponte en contacto con Recursos Humanos, llega a un acuerdo sobre cómo te gustaría organizar tu semana laboral. Siempre vale la pena preguntar.

5. Cuídate.

Dormir lo suficiente debe ser lo mínimo. Te recomendamos que te asegures de comer bien, hacer ejercicio con frecuencia, disfrutar de tus pasatiempos favoritos y relajarte. Te sentirás como si estuvieras en una rueda de hámster si no te concedes tiempo para las cosas que disfrutas, ya sea ver una serie completa de Netflix o hacer una caminata de 8 horas el fin de semana.

6. Tómate tiempo para ti.

Cuídate. Prepara un baño después del trabajo. Sal a caminar en tu hora del almuerzo. Priorízate a ti mismo. El trabajo se hará cuando priorices la importancia de ti mismo.

Estos consejos han sido diseñados para ayudarte a lograr una sensación de armonía entre tu vida laboral y personal. Nadie debería sentirse abrumado ante la idea de equilibrar ambos. Si deseas analizar tus opciones profesionales, da clic en la imagen de abajo para explorar nuestras vacantes.

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