Conviértete en el empleado más atractivo

Las competencias y habilidades son clave para crecer en un trabajo.

El futuro requiere de otras habilidades que harán que las empresas emprendan una "guerra" por el talento. Tú ya no deberás de tocar forzosamente la puerta, sino que las compañías serán las que te buscarán a ti.

Las cosas ya no son iguales, por ejemplo, antes los padres les decían a los hijos que más vale que empezaran a trabajar mientras estudiaban para agarrar experiencia, ya que eso era lo que por descontado iban a pedir los empleadores. De hecho, muchos años el problema fue que las empresas siempre pedían a alguien que la tuviese.

Si no sucedía, estabas en problemas. Ahora no, las empresas han cambiado sus requerimientos y hoy vale más que el empleado sea apto en otros campos y que la experiencia la obtenga sobre la marcha.

Antes, trabajar en un sólo lugar toda la vida era de las actitudes laborales más reconocidas, mientras que hoy, debido a la naturaleza cambiante del mundo, es muy poco probable que un empleado pueda lograr esta proeza. E incluso, no sólo eso, sino que la valoración al respecto ha cambiado radicalmente.

Hoy, saltar de trabajo en trabajo -bajo condiciones muy específicas- es cada vez más valorado porque permite a la gente enfrentar nuevos retos de manera constante, ya que las empresas comienzan a ver con distinta perspectiva la movilidad laboral.

Talento por  su cuenta

Con respecto a esta movilidad, los especialistas en recursos humanos de Kelly Services delinean más cambios en el panorama actual: cada vez la profesión de freelance va a ser requerida para proyectos en específico. Esto, se alinea con una de las grandes tendencias en el mundo del trabajo: cada vez las personas viven más años y gracias a los mejores sistemas de salud, viven más tiempo.

Y precisamente la figura de freelance encaja con estos trabajadores más antiguos, ya que ellos van a ofrecer su experiencia y van a ser necesarios (a través de este esquema) para conectar con las nuevas generaciones.

Las empresas los van a buscar porque el generation gap entre generaciones es importante y el conocimiento y la experiencia también. Estos talentos van a enriquecerse uno al otro y se va a crear una mancuerna para enriquecer a la compañía.

Los cambios son muchos y están motivados por distintos motores que están reconfigurando el mundo del trabajo. Estos catalizadores crearán colaboradores más productivos en el futuro y entre éstos están la conectividad global, las máquinas inteligentes y los nuevos medios, según apunta el estudio Future Work Skills 2020 realizado por el Institute for the Future.

Así, estos motores se ven influidos también por aspectos como una gran longevidad que va a hacer que la gente se acerque de una forma diferente a su propia carrera, vida en familia y educación; la popularización de máquinas inteligentes que van a realizar todo tipo de labores lo que va a llevar a preguntarse a los humanos para qué en realidad son buenos; una creciente cantidad de información que exigirá nuevas habilidades de procesamiento; la tecnología que transforma la forma de comunicarse; las organizaciones superestructuradas gracias a la tecnología y a las redes sociales y por último, un mundo completamente conectado.

Este estudio les llama "fuerzas disruptivas". Así, los individuos tienen que adaptarse al nuevo mundo del trabajo a través del desarrollo de ciertas habilidades que los prepararán ante el futuro.

Lo que se necesita

Ahora bien, ¿qué habilidades necesitan todos los trabajadores para enfrentar el trabajo del futuro? Primero, hay que resaltar que las cosas ya cambiaron. Mientras antes tú ibas a la empresa a tocar la puerta, es ahora ella la que va a buscar a los más aptos para ocupar sus puestos.

Es importante resaltar que si bien es importantísimo desarrollar este tipo de habilidades, a las que se les han llamado "del futuro" pero que en realidad ya se necesitan hoy, una gran parte de las compañías mexicanas aún se rige por esquemas tradicionales, explica Ana Estada, Directora de la consultoría Brújula Interior.

Primero es necesario desarrollar flexibilidad ante los cambios. Los especialistas explican que esta característica es una de las más importantes para encajar en el perfil del nuevo talento que las empresas están buscando.

La dinámica de los mercados es sumamente rápida. Hay gente que no sabe adaptarse al cambio y a los procesos. Hace muy bien algo mientras no se lo cambies, pero esta habilidad es muy buscada.

Entre las habilidades que enlista la experta de Brújula Interior, están la inteligencia emocional, la gestión del conocimiento y la colaboración virtual y por supuesto, el que no se adapta no encontrará trabajo.

Toma de decisiones y redes

Al igual que la adaptación, también está la búsqueda de soluciones y de toma de decisiones de forma rápida, efectiva y estratégica. Hoy ya no sólo es importante lo que se aprende en la escuela, sino que incluso en el mismo grado es esencial lo que el individuo pueda hacer con esa información que se le proporciona, es decir, que saque sus propias conclusiones y sea capaz de generar nuevo conocimiento a partir de ello y con esto tomar decisiones propias.

Otra habilidad necesaria, coinciden los especialistas, es la capacidad de relacionarte con distintos tipos de equipo y en general, que tu habilidad de comunicarte esté desarrollada en una forma profunda y directa. Así lo explica el estudio Future Work Skills 2020.

"Los empleados socialmente inteligentes son capaces de evaluar las emociones de aquellos alrededor de ellos y adaptar sus palabras, tonos y gestos de forma acorde. Esta ha sido una habilidad clave para trabajadores que necesitan colaborar y construir relaciones de confianza", señala el estudio de la Universidad de Phoenix.

Las habilidades virtuales ya no son un plus sino una necesidad. Es necesario ser productivo e intercambiar ideas a pesar de la separación física. Este ambiente de trabajo virtual demanda un nuevo paquete de competencias, como el que los líderes mantengan motivados a su equipo a pesar de la distancia o la capacidad de ofrecer retroalimentación en estas condiciones. Un estudio de Stanford encontró, según cita este mismo documento, que el tener una vida virtual ofrece beneficios emocionales y sociales.