Iniciando el Lunes una nueva semana y te pregunto ¿a quién vas a ayudar? En ocasiones el arranque de cada semana con lleva el cumplimiento de muchas tareas y un torbellino de aspectos que van saliendo, sin embargo, si le das un enfoque diferente viéndolo desde dos perspectivas:
La primera si sabemos que cada acción que haces contribuye al apoyo de alguien, para avanzar en un proceso, un proyecto, una propuesta porque no hacerlo y quitar excusas, ponerle toda nuestra mejor intención y si ya estas en la tarea y no te queda otra hacerlo con gusto dando lo mejor de ti, te aseguro que si le pones todo tu entusiasmo e interés, generas que las cosas te salgan de maravilla.
El segundo punto es aquellas cosas que quizá te den un poco mas de pereza o miedo hacer, piénsalas como un reto, si no nos empujamos a realizar nuevas actividades o a completar esos proyectos como es que esperas poder progresar. 
Decía Einstein que “locura es querer tener resultados diferentes haciendo lo mismo”, toda la gente dice querer crecer, lograr más, pues entonces no te detengas, haz aquello que has dejado en el tintero por hacer, recuerda que nuestro tiempo es finito, no te dejes llevar por la inercia de que mañana porque no tienes tiempo, claro que lo tenemos si no te invito a que revises tu celular y en la sección de tiempo que pasas en redes sociales, échale un ojo a las horas que perdemos haciendo cosas que nos suman nada y luego seguimos diciendo que no hay tiempo.
Ahora con un ejemplo básico como el que te comparto a continuación te lo dejo mas claro, si quieres aprender un idioma que pasaría si cada día te pusieras el firme proceso de aprender 5 palabras de ese idioma, al pasar un año no podrías ya dominarlo, y así con todo lo que dices que no tienes tiempo. Si nos dedicáramos a mejorar solo un 1% día te imaginas hasta donde podrías llegar. 
Así que aprovecha cada día es un regalo, todo va y viene en su justa medida, menos el tiempo, es tu decisión el tomar aire, respirar y como locomotora, dar el primer paso, recuerda que se requiere el primer paso para caminar un viaje de cien millas, este es un momento, vívelo dale el peso que debería tener único (nunca vuelve), y reitero piensa a quien vas a ayudar a dar esperanza y cuanto quieres crecer hoy.
