Este 9 de diciembre en su reciente conferencia matutina, el presidente de la República, acompañado por representantes de la iniciativa privada y los trabajadores, trató dos temas fundamentales, la subcontratación y el reparto de utilidades. En el mensaje por parte del sector obrero, Carlos Aceves del Olmo, Secretario General de la CTM diferenció entre el “outsourcing blanco” y el “outsourcing negro”, que es con el que hay que terminar.
Por su parte, Carlos Salazar Lomelín, presidente del Consejo Coordinador Empresarial, dentro de su discurso defendió los derechos de los trabajadores y reiteró que los empresarios nunca ampararán ningún tipo de irregularidad, apostando por el diálogo y el consenso, dijo que confía en que la propuesta que llegue al Congreso para su debate, sea mucho mejor que aquella de la que se partió. La Secretaria del Trabajo, Luisa María Alcalde, señaló que la iniciativa en el siguiente periodo de sesiones, en febrero de 2021, tendrá la calidad de preferente para aprobarse en un plazo no mayor a 30 días.
Contexto de la iniciativa de reforma
Recordemos que el pasado 12 de noviembre el presidente presentó su propuesta de reforma para regular el outsourcing, debido a que existe un comportamiento indebido de determinadas empresas que llevan a cabo prácticas abusivas, de elusión y evasión fiscal, además de disminuir los derechos de los trabajadores.
La finalidad de esta reforma es acabar con estas malas prácticas, sin embargo, es importante hacer una distinción correcta entre la subcontratación formal y estas empresas que incumplen con lo estipulado en la ley, provocan la precarización del trabajo, niegan los derechos y prestaciones de los trabajadores y menoscaban al erario. A eso se refiere Aceves Del Olmo, cuando enfatizó en la diferencia entre “outsourcing blanco” y “outsourcing negro”.
Uno de los principales motivos que acompañó a esta propuesta de reforma, indica que en México de 900 empresas que ofrecen el servicio de subcontratación, solo 40 pagaban impuestos. Por lo anterior, es un hecho que es necesario regular la figura de outsourcing, con la finalidad de mejorar las prácticas de subcontratación y evitar la irregularidad, por lo que estamos de acuerdo con la postura de la AMECH, en la que se menciona que se debe evitar su eliminación, la cual tendría un impacto directo en la economía nacional, generaría enorme incertidumbre al sector privado y desincentivaría la inversión.
¿Qué es la subcontratación legal?
En todo el mundo, todos los días, miles de personas contribuyen al éxito de las empresas sin ser empleadas directamente. Esta fuerza laboral está compuesta por trabajadores temporales o contingentes, contratistas y contratistas independientes, consultores, pasantes y otras clasificaciones. Se estima que el porcentaje de trabajadores subcontratados es casi tan alto como el 50% en empresas de todos los tamaños e industrias.
Para entender bien cómo funciona la figura de la subcontratación legal u "outsourcing blanco", podemos poner en contexto la situación actual que estamos enfrentando debido a la crisis por la pandemia de Covid-19, ya que las empresas necesitan contar con apoyo para contrarrestar los efectos económicos y disminuir la tasa de desempleo, además de que es indispensable que tengan entre sus filas al mejor talento que pueda impulsar la reactivación de su negocio para alcanzar sus objetivos organizacionales. Aquí es donde la subcontratación formal juega un papel de protagonista, ya que este esquema apoya a las empresas en la búsqueda, atracción, selección, contratación y desarrollo de talento, permitiendo que puedan enfocarse en la función principal de su organización, mientras reducen costos de operación en otras áreas (como Recursos Humanos) y fortalecen su productividad.
Las empresas que brindan servicios de subcontratación formal y legal están obligadas a garantizar al 100% todos los derechos laborales a los trabajadores, dentro de los cuales se encuentra un contrato laboral, salario digno, jornadas definidas, pago de tiempo extra, pago completo y correcto de las obligaciones patronales como son la seguridad social, Infonavit, Infonacot, fondo para el retiro, goce de periodo vacacional, pago de prima vacacional, aguinaldo y PTU, entre otros. Además, deben cumplir con sus correspondientes obligaciones fiscales y pago de impuestos.
Los 4 puntos del Acuerdo Tripartita
Durante la mencionada conferencia de este 9 de diciembre, el sector empresarial, el sector obrero y el Gobierno de México llegaron a un acuerdo que consta de cuatro puntos:
- Las partes se comprometen a resolver el problema del abuso de la subcontratación, donde las empresas del país iniciarán de inmediato el proceso para regularizar sus plantillas en el marco de la iniciativa presentada por el Ejecutivo.
- El Reparto de Utilidades no ha quedado suficientemente definido, ni ha sido socialmente debatido, por lo que se necesita tiempo para una discusión entre los sectores para definir un sistema de reparto de utilidades justo y se iniciará con el proceso de consulta.
- El sector empresarial solicita un plazo de tiempo para llevar a cabo este proceso, por ello se solicita se pueda posponer al mes de febrero de 2021 la discusión parlamentaria de la iniciativa que se señalara como preferente para que en un plazo no mayor a 30 días pueda discutirse y, en su caso, aprobarse.
- Se hace un llamado a las empresas que manejan nóminas, para que de inmediato dejen de desarrollar prácticas irregulares. El IMSS, el INFONAVIT y el SAT, harán un exhorto formal a estas empresas y de encontrarse irregularidades se procederá de inmediato de forma administrativa o penal.
En conclusión, la iniciativa presentada el 12 de noviembre por el Ejecutivo, no tiene la calidad de preferente, en este sentido, se tendría que presentar otra iniciativa para que sea preferente, por lo tanto el nuevo proyecto probablemente vendrá con modificaciones como lo hizo saber el presidente en su comunicación. El principal tema de discusión radica en el reparto de utilidades y la figura del insourcing, el gobierno pretende garantizar esta prestación a ciertos meses de salario diario y desaparecer la figura del insourcing. Con la información que se tiene al día de hoy, no hay una eliminación de la figura de subcontratación, solo se limita a proporcionar actividades especializadas que no tengan relación con el objeto social y la actividad económica de la empresa beneficiaria.
El mensaje de la iniciativa privada es consistente con el mensaje del ejecutivo, donde ambos coinciden en que se tendrá que modificar la redacción para fortalecer la iniciativa. Por su parte, el sector obrero también hace una diferenciación de servicios de subcontratación el “outsourcing blanco” y el “outsourcing negro” y el que tiene malas prácticas será el que se tenga que erradicar. De tal forma que la postura de parte de algunos miembros de la cúpula empresarial es regulación sí, prohibición no.
Kelly, a través de la AMECH, seguirá buscando incidir con los actores clave del poder ejecutivo y legislativo, así como las cúpulas empresariales en la definición de los mejores cambios y modificaciones a la iniciativa. Haciendo énfasis en que, hasta este momento, ninguna de las leyes que tienen definida y regulada la figura de la subcontratación ha sufrido modificaciones.
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